Un nuevo encuentro virtual organizado por La Subcomisión de Niñez, Adolescencia y Familia del Instituto Proyectar. El invitado de este jueves fue el Psicólogo Mariano Podesta en el Día Mundial para la Prevención del Suicidio, desarrollando el tema: “Suicidio y posibles salidas, una apuesta al otro”.
El Dr. Rubén Darío Golía abrió la jornada resaltando la importancia del abordaje de estos temas y expresó: “Es una problemática que nos está tocando muy de cerca e incluso aumentando sus índices en lo que va del año”.
Mariano Podesta introdujo la conversación exponiendo algunos datos sobre la prevención del suicidio: “Lo más importante es la contención de la comunidad frente a una persona que se encuentra en un estado de angustia extremo”. “No hay que subestimar los estados de desesperación y de angustia”. “Alguien que se suicida no tiene un problema con la vida, sino que sufre de un dolor insoportable que solo puede calmar por medio del suicidio”. “De algún modo necesitamos apostar a que la persona que piensa suicidarse pueda escuchar esas palabras que en algún momento le faltaron”.
El Licenciado Lucas Casella integrante del grupo de coordinadores de la subcomisión, desarrolló y destacó dos factores de posible riesgo: “Uno es la desesperanza, cuando una persona tiene la sensación de que nada va a mejorar. Y otro es la autogestión, la idea de que una persona no puede pedir ayuda ni puede resolver su problema”.
Por su parte el Psicólogo Podesta arrojó algunos porcentajes haciendo comparaciones entre hombres y mujeres. Mencionó que las mujeres suelen tener más herramientas simbólicas por lo cual están más abiertas a hacer una terapia para tramitar sus angustias, a diferencia de los varones que muchas veces perciben el pedido de ayuda como una disminución de su virilidad: “La problemática del suicidio también está atravesada por el pensamiento machista, ya que los índices muestran un mayor porcentaje de varones que consuman el hecho”. “El varón que está habitado por el discurso patriarcal se siente mucho más desesperanzado frente a una ruptura amorosa”.
El Dr. Rubén Darío Golía abrió la jornada resaltando la importancia del abordaje de estos temas y expresó: “Es una problemática que nos está tocando muy de cerca e incluso aumentando sus índices en lo que va del año”.
Mariano Podesta introdujo la conversación exponiendo algunos datos sobre la prevención del suicidio: “Lo más importante es la contención de la comunidad frente a una persona que se encuentra en un estado de angustia extremo”. “No hay que subestimar los estados de desesperación y de angustia”. “Alguien que se suicida no tiene un problema con la vida, sino que sufre de un dolor insoportable que solo puede calmar por medio del suicidio”. “De algún modo necesitamos apostar a que la persona que piensa suicidarse pueda escuchar esas palabras que en algún momento le faltaron”.
El Licenciado Lucas Casella integrante del grupo de coordinadores de la subcomisión, desarrolló y destacó dos factores de posible riesgo: “Uno es la desesperanza, cuando una persona tiene la sensación de que nada va a mejorar. Y otro es la autogestión, la idea de que una persona no puede pedir ayuda ni puede resolver su problema”.
Por su parte el Psicólogo Podesta arrojó algunos porcentajes haciendo comparaciones entre hombres y mujeres. Mencionó que las mujeres suelen tener más herramientas simbólicas por lo cual están más abiertas a hacer una terapia para tramitar sus angustias, a diferencia de los varones que muchas veces perciben el pedido de ayuda como una disminución de su virilidad: “La problemática del suicidio también está atravesada por el pensamiento machista, ya que los índices muestran un mayor porcentaje de varones que consuman el hecho”. “El varón que está habitado por el discurso patriarcal se siente mucho más desesperanzado frente a una ruptura amorosa”.
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