La situación de los trabajadores municipales de Chacabuco es crítica. Con sueldos de no más de $23.000 pesos para los empleados de planta permanente, pero sueldos de indigencia en los tercerizados que no superan los $14.000 o cobran a través de subsidios de hambre. Los mismos se encuentran congelados desde diciembre de 2019 (¡con una inflación de más del 50%!) cuando Victor Aiola fundió al municipio. El gobierno corrió la fecha de cobro del último día hábil de cada mes a aproximadamente el 5 o 6. Los mismos se pagan desdoblados, primero sueldo, luego horas extras y guardias. El ataque al aguinaldo pasó y finalmente se pagó en dos cuotas. También son obligados a ir contra su voluntad, mediante presiones y amenazas de acciones legales para controlar los accesos sin los elementos necesarios. Todo esto sumado a una persecución en redes sociales y sumarios, malos tratos por parte de supervisores de área. Es el manejo empresarial que realiza Aiola y su gobierno, un intento de adoctrinamiento laboral a través del miedo.
La burocracia sindical de ATE y el Sindicato de Trabajadores Municipales no han pasado de las expresiones de rechazo a esta política, pero en ningún caso han llamado a ningún tipo de medida de lucha, ni siquiera llamaron a debatir a las bases. Ante el pedido de un bono de $14.000 el intendente comentó que: “lo veía lejano”, la burocracia respondió con silencio. Ahora amenazan con “parar todo” pero no llaman a las bases a debatir la situación y que las medidas de lucha concretas salgan de los trabajadores. Esa política, como viene demostrándose, está condenada al fracaso e implica, en el fondo, una complicidad con el gobierno de turno, entiéndase: gritan un poco, pero dejan pasar cada uno de los ataques.
Desde el Partido Obrero llamamos a todos los trabajadores municipales a organizarse en asambleas por sector para debatir todos estos temas y comenzar a tomar las decisiones por ellos mismos. La elección de nuevos delegados electos por las bases es un primer paso. Plantear medidas de lucha reales en defensa de sus condiciones laborales. La creación de comisiones de seguridad e higiene por parte de los trabajadores que definan protocolos sanitarios para enfrentar la pandemia. El reclamo inmediato por la apertura de paritarias. El aumento mensual automático por inflación. El planteo de un salario municipal igual a la canasta básica. El pago íntegro de salarios como estaban acostumbrados el último día hábil de cada mes. Solo mediante la organización independiente y la lucha por una nueva conducción de los sindicatos estatales podrán defenderse del ajustador de Victor Aiola y su gobierno. La organización les permitirá no ser identificados individualmente y perseguidos por reclamar. Nos ponemos a disposición para apoyar en esta lucha a quienes nos cuidan desde el día uno de la pandemia como lo hacen desde hace años.
Asambleas por lugar de trabajo para enfrentar los ataques de Aiola.
Viva la lucha de los trabajadores municipales.
Partido Obrero Chacabuco – FIT - U
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