Desde diciembre de 2015 con la llegada del gobierno de Cambiemos, la gestión de Carolina Stanley al frente del Ministerio de Desarrollo Social dio de baja 170.000 pensiones no contributivas por invalidez mediante un endurecimiento de las condiciones para acceder al beneficio.
El titular de la Comisión Nacional de Pensiones Asistenciales (CNPA), Guillermo Badino, defendió los recortes y aseguró que una persona con cierto grado de discapacidad, como alguien con síndrome de down, “puede trabajar si lo desea”.
Esta es otra decisión política del gobierno de Mauricio Macri, una decisión política que no hace más que negar los derechos de las personas más vulnerables. Esta medida tiene como precedentes el ajuste que sufrieron nuestros abuelos y abuelas en la cobertura de los medicamentos, el cese del Programa Qunita que tenía como beneficiarias a las familias más humildes de nuestro país, el recorte presupuestario en comedores escolares. En estos hechos se ve reflejada la insensibilidad con la que se maneja este Gobierno.
Frente a esta realidad política y económica estamos convencidos de que la salida es la unidad de los sectores populares en la lucha contra esta avanzada neoliberal, que no hace más que negar derechos a los más desprotegidos y gobernar en beneficio de los sectores de poder.
Mauricio Barrientos Diputado Provincial (FpV-PJ)
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