(Prensa Dario Golia), Muchos años escuchando como distintos personajes doctorados en Universidades extranjeras nos explicaban con mucha solidez lo que no se podía hacer como País. Nos hablaban de la inflación que generaban los salarios, el gasto fiscal, los equilibrios, el déficit, financiamiento internacional, gerenciamiento, mercados, privatizaciones, derrame de la copa, enfriar la economía, organismos internacionales de créditos, fondo monetario internacional, etc., por citar algunos ejemplos.
Los temas económicos ganaban notoriedad en los diferentes medios siendo los principales títulos de los diarios y los noticieros radiales y televisivos, generando un sentimiento de angustia en la población, impotencia, resignación, explicándonos lo que era difícil de explicar y nadie podía resolver.
A partir del año 2003 la economía resulto un tema no traumático para la sociedad, pasando a ser un tema de la política. En estos años nos animamos a debatir derechos y ver como la política resolvía los temas económicos para el País y para el Pueblo. Hablamos de crecimiento, desarrollo, inclusión, de Estado, derechos, etc.
En estos últimos días se pudo ver en los diferentes medios volver a los viejos debates económicos, desfile de personajes especialistas explicando, calculando, especulando con estos temas y haciendo lobby para sus respectivos intereses en muchos de los casos.
Se debate de que magnitud es el ajuste, de cuánto va ser la devaluación, en cuanto tiene que estar el tipo de cambio, cuando se le va a pagar a los fondos buitres, que hay que darle tiempo al nuevo gobierno y la teoría del derrame, volver a la ortodoxia económica que fracasó en nuestro País y el mundo.
Dr. Rubén Darío Golía.